Entre ventiscas, soledad y temperaturas bajo cero, Andrea Dorantes aprendió que la cima no es el final, sino el principio de un propósito mayor.
Desde León, Guanajuato —una ciudad sin montañas— esta aventurera de 29 años se convirtió en la latinoamericana más joven en escalar el Monte Everest y completar las Siete Cumbres. Ahora se prepara para un nuevo reto: cruzar sola y sin asistencia el desierto blanco de la Antártida rumbo al Polo Sur.
Del encierro al infinito
Durante la pandemia, mientras muchos redescubrían la cocina o el yoga, Andrea Dorantes decidió subir el Pico de Orizaba. “Ni siquiera sabía cuánto medía”, recuerda entre risas en entrevista con Emprendedor.com. Aquel primer ascenso despertó una pasión inesperada: el montañismo. Poco después, se propuso un objetivo que parecía imposible: conquistar las montañas más altas de cada continente en menos de dos años. Lo cumplió en un año y diez meses.
A los 29 años, Dorantes se convirtió en la latinoamericana más joven en escalar el Everest y completar las Siete Cumbres, una hazaña que incluye el Aconcagua (Sudamérica), Kilimanjaro (África), Elbrus (Europa), Denali (América del Norte), Puncak Jaya (Oceanía), Monte Vinson (Antártida) y, por supuesto, el Everest (Asia). Según el Guinness World Records, solo 416 personas en el mundo han completado este reto.



