Con el uso de nuevas tecnologías, como microscopios digitales portátiles y drones, un equipo multidisciplinario de la UNAM y de otras instituciones trabaja 10 monumentos públicos conmemorativos de la Ciudad de México para su estudio, registro detallado y documentación, a fin de coadyuvar en la urgente necesidad de su conservación.
La Universidad Nacional, a través del Seminario Los Monumentos Públicos en México. El siglo XIX, con sede en el Instituto de Investigaciones Estéticas (IIE), lleva a cabo, por primera vez, un proyecto de investigación integral, el cual incluye sugerencias a las autoridades para su restauración y mejor preservación.
Hugo Arciniega Ávila, investigador del IIE y titular del Seminario, precisó en entrevista que son vulnerables por el cambio en su interpretación histórica; cuestiones climáticas y contaminación; y por su relación con el entorno social.
Con financiamiento del Programa de Apoyo a Proyectos de Investigación e Innovación Tecnológica de la Universidad es posible que el equipo conformado por especialistas en historia del arte, historia, científicos de materiales, restauradores, fotógrafos, físicos, químicos, etcétera, trabaje en este plan.
Son 10 los monumentos elegidos por su relevancia histórica y vulnerabilidad, entre ellos el de José María Morelos, que data de 1865, develado por el emperador Maximiliano de Habsburgo, el cual en 1907 se trasladó a su ubicación actual, dando nombre a la colonia de la alcaldía Venustiano Carranza.
Los dos de Cristóbal Colón, uno de la autoría de Charles Cordier, que se instaló en Paseo de la Reforma en 1877 y que fue retirado hace un lustro por asociarse al colonialismo; y el de Manuel Vilar, ubicado en Buenavista desde su inauguración en 1892.



